El tabasqueño valora su trabajo en Seguridad, pero el futuro canciller no le perdona una supuesta traición con las denuncias de la Línea 12.
Son horas decisivas para algunos puestos claves en el próximo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que incluyen sobre todo los espacios no cubiertos en la Secretaría de Gobernación. Los perfiles que vienen trabajando con Olga Sánchez Cordero pero no lograron ingresar a las escasas tres subsecretarías que el tabasqueño habilitó.
En ese grupo aparecen Leonel Godoy, Leonel Cota y Joel Ortega. La figura de Ortega ocupa un lugar incómodo por estos días en los equipos de transición. Se trata de un hombre de larguísima trayectoria en la vida capitalina, con capacidad de gestión -sobre todo en temas complejos, como Seguridad y Transporte-, pero que también cosechó en los últimos años algunas broncas.
Ortega fue secretario de Seguridad Pública en el último tramo de gestión de AMLO en la Ciudad, y fue ratificado en ese cargo por Marcelo Ebrard. Pieza clave de ese Gabinete, el propio Ebrard lo impulsó como jefe de campaña de Miguel Ángel Mancera, su sorpresivo delfín para la sucesión.
El resto de la historia ya es conocida, aunque se niegue públicamente: el entorno de Ebrard acusa a Mancera de haber sellado una alianza con Miguel Ángel Osorio Chong, que incluyó una escalada política contra el jefe de gobierno saliente.
"El que preparó las carpetas con las denuncias de la Línea 12, e incluso las que incluían a sus familiares fue Joel", señalaron siempre los seguidores de Ebrard, quien a mitad del sexenio debió salir del país.
Ahora Ebrard se convirtió en un hombre de extrema cercanía de AMLO, pero Ortega también se subió a ese barco. En las últimas semanas, Joel Ortega habría levantado la mano para ocupar el Instituto Nacional de Migración, rol que depende de la Secretaría de Gobernación pero que tiene un nexo permanente con cancillería. Allí se habría solicitado el primer veto.
Pero el escenario no mejoró, por que el otro cargo que buscaría Ortega sería la nueva Agencia de Inteligencia, que vendría a reemplazar al Cisen, sólo que ahora estaría en manos de Alfonso Durazo en la Secretaría de Seguridad Pública. Un cargo todavía más problemático.
LPO ya explicó que Durazo arma contrarreloj un equipo político y técnico que lo acompañe en la creación de la Secretaría de Seguridad. Hasta el momento, el sonorense sumó a Eunice Rendón, la estratega de la fallida política de prevención de Peña Nieto.
Otros candidatos a pegar el salto son Leonel Cota y Leonel Godoy, quienes también habría pedido el Instituto de Migración, cargo que también disputan el monrealista Rodolfo González y Alejandro Encinas para uno de sus fieles. Pero Cota y Godoy ya habría expresado que están más que dispuestos a manejar una a subsecretaría en Seguridad.
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